Recientemente se ha demostrado la importancia que la microbiota tiene en la respuesta inmune.
La microbiota es el conjunto de organismos vivos que viven en nuestro tubo digestivo. Siempre hemos pensado que las bacterias son potencialmente dañinas, pero lo cierto es que muchas son fundamentales para la vida y para mantener una adecuada salud. Un gran porcentaje de las enfermedades que sufrimos pueden estar relacionadas con una microbiota poco saludable, por eso, los últimos estudios que apuntan a que la composición y la salud de la microbiota son determinantes frente al pronóstico de la Covid-19 parecen una respuesta plausible del porqué algunos pacientes pasan la enfermedad de forma más virulenta que otros. Según este estudio, los pacientes más graves presentaban una microbiota mucho más empobrecida que otros pacientes que pasaron la enfermedad con mucha menor sintomatología. Hoy por hoy, sabemos que nuestros organismos intestinales tienen un papel clave en la respuesta inmune frente a cualquier enfermedad. De hecho, el tracto digestivo tiene incluso su propio sistema inmune lo que, una vez más, demuestra la importancia de la correcta salud intestinal. Entonces la pregunta del millón es, ¿Qué podemos hacer para que nuestra microbiota se mantenga en las mejores condiciones?
- Aunque no es el único, la alimentación sí es el factor clave. Ya lo decía Hipócrates: “que la comida sea tu alimento, y el alimento tu medicina”.
- Evitar en la medida de lo posible los antibióticos.
- Loa anticonceptivos orales también pueden descompensar el equilibrio de nuestra microbiota, así como los antiinflamatorios no esteroideos (AINES)
- Los químicos ambientales también son potencialmente dañinos.
- Los alimentos probióticos como el chucrut, el kéfir o el té kombucha, en cambio, nos ayudarán a repoblar con bacterias fermentadas el tracto intestinal
- Reducir en gran medida algunos carbohidratos y perder el miedo a las grasas saludables también nos beneficiará para mantener una correcta salud intestinal
- Los prebióticos, como el ajo crudo, son alimentos que sirven de alimento de las bacterias intestinales, por lo que incluirlos en la alimentación, puede ser un punto importante.
- Los ayunos intermitentes, tan en boca de todos últimamente, también parecen haber demostrado su efectividad, por lo que seguirlos, de forma controlada, es otro factos importante a tener en cuenta
- Ciertos complementos alimenticios también son importantes a la hora de mantener el equilibrio intestinal (probióticos o cúrcuma entre otros)
Los médicos lo están diciendo, los estudios lo están demostrando:
𝐄𝐧𝐭𝐫𝐞𝐧𝐚, 𝐜𝐮𝐢𝐝𝐚 𝐭𝐮𝐬 𝐡𝐚́𝐛𝐢𝐭𝐨𝐬 𝐲 𝐡𝐚𝐳𝐭𝐞 𝐟𝐮𝐞𝐫𝐭𝐞 𝐟𝐫𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐚𝐥 𝐯𝐢𝐫𝐮𝐬!!
- La actividad física moderada es clave para fortalecer el sistema inmunológico, que se puede definir como la defensa natural del cuerpo frente a las infecciones.
- Además, el ejercicio físico también ayuda a prevenir otras patologías que se han considerado como agravantes de la enfermedad
- Existen diferencias entre las personas obesas que practican ejercicio físico respecto a las que no.
- El estrés es otro factor que puede debilitar el sistema inmunológico. Esto ocurre porque en estas situaciones el organismo segrega cortisol, una hormona inmunosupresora: “Por ello, la gente en situación de estrés tiene mayor propensión a tener infecciones”.
Así pues, toda actividad que implique la reducción de liberación de inmunosupresores como el cortisol va a ayudar al sistema inmunológico y, por ende, a la salud.
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